¿Qué significa El Emperador en una tirada?

Este arcano expresa jeroglíficamente el seno (un pecho de mujer). De aquí la idea de un objeto capaz de producir abundante alimentación, fuente de un crecimiento futuro (espiritual). También representa la abundancia nacida de la división. Es igual al Mago (Apolo), un signo de creación activa.

Este arcano representa a júpiter esta asociado al crecimiento de la sabiduría y la expansión de la conciencia. La energía intelectual!

Por todas partes el espíritu trabaja y fecunda la materia para la vida; el pensamiento y el alma están esparcidos por todas partes.

Apoderándose del pensamiento que produce las diversas formas, se convierte uno en dueño de esas formas y se hace servir para nuestros usos.

El infinito se encuentra en nuestras aspiraciones y en nuestros recuerdos, y aunque nuestro cuerpo sea pesado nuestra alma tiene alas.

Con este arcano se forma la cruz. La cruz no es el punto donde se cortan dos líneas, sino el punto de partida de cuatro líneas infinitas.

En el centro de la cruz florece la rosa mística, la rosa de la luz, la flor de la vida y del amor, cuyos pétalos distribuidos ordenadamente representan los corazones de los elegidos en su armoniosa jerarquía. La Rosa es el símbolo de la Gran Obra.

Las cuatro formas de los brazos de la cruz corresponden las cuatro direcciones. Y también las cuatro ideas filosóficas: el espíritu, la materia, el movimiento y el reposo.

Ahora bien estando la familia humana llamados todos a la creación de la emancipación de los espíritus creados por medio de la prueba, están colocados desde su nacimiento, entre esas cuatro fuerzas dos positivas y dos negativas, con la facultad de admitir o negar el bien (libre albedrío). Encontrar el punto fijo, es decir, el centro moral de la cruz, es el primer problema que se enfrenta el hombre. Y así es como los hombres con sus espíritus comienzan por ser arrastrados por las corrientes animales ( el cuerpo haciendo de mente) de la naturaleza, unos por la ira, otros por la tristeza, muchos por el fracaso etcétera… estos estados nos atrapan y mientras no se eliminan no pueden hacer uso de la razón ni encarnar a Dios.

La fuerza de atracción se fija siempre en el centro de los cuerpos, y la de proyección en los contornos, o en su superficie (epigenética).

El amor es un centro que atrae; el cerebro, atrae, repele y equilibra.

Este arcano nos presenta el estado juvenil de las cosas, también es confusión caótica y subsiguiente iluminación, hay una reflexión. Pero con indicación del peligro de quedarse quieto detenido.

El consultante debe observarse, su conducta, y actuación escrupulosa, debe así nutrir su carácter.

Así adquiere en medio del peligro esa calma que imita la Gran Calma de una montaña que está al borde de un precipicio.

El consultante puede que no sepa hacia dónde dirigirse, pero si es constante ira rellenando todo lo que le impide el progreso, y así obtiene el éxito.

Es preciso que de con un maestro experto. Para ello hace falta, en primer lugar, que uno mismo advierta su propia inexperiencia y emprenda la búsqueda de un maestro. Únicamente semejante modestia y diligencia acreditarán la necesaria disposición receptiva, que abra de manifestarse en un devoto reconocimiento hacia el maestro. Cuando a ello se agrega la perseverancia (Voluntad), que no cesa hasta que uno se haya apropiado del saber punto por punto, se tendrá asegurado un hermoso éxito.

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