Simbología de la flor de la vida.
La mayoría de las historias del antiguo Egipto, de los Mayas y los Incas por nombrar algunas, hablan de que los dioses del Sol, llegaron a la tierra y les enseñaron ingeniería, a escribir, todos sus conocimientos. El Sol es el símbolo de la luz del conocimiento; también es la piedra de los filósofos; el iniciador cristiano.
Para entender la simbología de la flor de la vida tenemos que saber que es un Toroide, un toroide es como la respiración del universo, es la forma que toma la corriente de energía a cualquier nivel de existencia; es la forma que tienen los átomos, los fotones y toda unidad mínima constitutiva de la realidad.
Pero también existe una estructura subyacente en cómo encaja la corriente, una especie de esqueleto que se llama Vector en equilibrio un término acuñado por uno de los grandes pensadores del siglo XX, Buckminster Fuller.
El Toroide y el Vector en equilibrio son modelos primarios fundamentales para la creación del universo a todas las escalas, como se ve en las láminas.
Las diferentes culturas han codificado el toroide durante milenios. Al parecer las culturas antiguas habían incluido este código en los símbolos más persistentes entonces posibles; en historias; iconos; alfabetos; pirámides; templos y demás…
El templo de Osiris
En uno de los lugares más sagrados del mundo, en el templo de Osiris en Abydos Egipto, se han encontrado muy pocos símbolos y signos, sin embargo hay un dato muy importante, un símbolo apenas visible, pero muy preciso y claro, no está grabado como a cincel en la piedra, ni tampoco esculpido, está grabado con un objeto candente en la estructura atómica de la piedra, de una forma extraordinaria.
Nassim Haramein, físico teórico, ha descodificado el símbolo de Osiris en 3D ya que nuestro mundo no está formado solo por 2D. Tiene sentido que los códigos o símbolos que transmiten información sobre nuestro mundo tampoco se limiten a diseños planos. Su versión tridimensional del símbolo de Osiris la flor de la vida empieza con el Vector en equilibrio, un campo de fuerza en perfecto equilibrio que irradia 12 líneas de energía iguales. Estabilizan su centro al igual que los 12 radios de una rueda; los 12 trabajos de Hércules, deidad solar, que estabilizan el espíritu del hombre; los 12 rayos de la corona.
El modelo primario de esta corriente de energía en equilibrio alrededor de esta estructura es el toroide. Tiene un total de 64 pirámides llamadas tetraedros. Si incluimos esferas que representen el campo de energía toroidal que envuelve a cada uno de los triángulos y después eliminamos los triángulos, nos encontramos una matriz que es sorprendentemente una superposición exacta del símbolo de la flor de la vida el símbolo que devuelve la vida a Osiris, osea el espíritu del hombre otra vez…
Forbudden, China
Si nos vamos a China, en Forbiddem, Beijing, hay un templo sagrado construido en 1420, y
si vas a la ciudad prohibida allí residen los dioses del Sol. En la entrada encontrarás los perros Fu, los guardianes del conocimiento, quienes protegen bajo sus patas el mismo símbolo de la Flor de la Vida.
La misma figura geométrica de 64 unidades de energía aparece codificada de nuevo en culturas de todo el mundo desde el polo Norte al polo Sur.
En el árbol de la vida cabalístico de los hebreos se crea la misma estructura (que vemos en las fotos), con el Vector en equilibrio de nuevo incluido en cada uno de los niveles.
El sistema de sabiduría ancestral chino llamado I Ching, se basa en 64 hexagramas símbolos formados por grupos de 6 líneas, unas continuas otras abiertas; abierta femenina Yin; cerrada masculina Yang.
Y estas líneas se pueden unir como las 6 caras de un tetraedro, y juntos forman el cristal tetraédrico de 5 caras.
Este mismo patrón de la flor de la vida aparece en los estudios modernos.
La doble hélice tiene un alfabeto de 64 codones que se utiliza para codificar el ADN humano.
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